Ayer el punto de encuentro fue el mítico Teatro Cariola, que poco a poco empezaba a llenarse para el tan ansiado reencuentro con Tilo Wolf y Anne Nurmi, a quienes no veíamos desde octubre del 2023. La dupla alemana ha logrado consolidar una fuerte relación con el público chileno por su humildad y cercanía con los fans, es por esto que siempre cada show es bastante esperado.
Partimos la jornada con Dead Christine, subiendo al escenario puntualmente a eso de las 20.00, haciendo un breve pero consistente repaso por su carrera. La voz mágica Cristina Formo logró cautivar a los asistentes, que a medida que iban llegando se acercaban al escenario para poder apreciar la puesta en escena. Una presentación limpia y con un setlist impecable que concluyó con un clásico de su primer álbum "What If It All Goes Down", dejando la atmosfera precisa para lo que se venía a continuación.
A las 21.00 hrs, llega el tan ansiado encuentro cuando suena "Lacrimosa Theme", la característica intro de la banda que marca el inicio de cada jornada donde el conjunto sube al escenario y se prepara para el show. Es así como con un Cariola lleno y un público ansioso, comienza Avalon, un himno de su último álbum, que está cargado de acordes oscuros y una lírica llena de desesperanza.
Tras tal enérgica introducción, comienzan a sonar algunos de los clásicos como Der Morgen Danach, Alleine Zu Zweit y Lichtgestalt, intercalando las melodías con algo de los más recientes trabajos de la banda. Tales como Dark Is This Night o Memoria -debutando en vivo-, donde Anne transmitió todo su sentir a través de una interpretación poética, en la cual podemos destacar su registro vocal inigualable.
Y es que cada show en vivo de la banda siempre es muy emotivo, debido al lazo que hay entre Lacrimosa y sus fans; una relación que se ha consolidado fuertemente a través de los años, desde su primera visita en el país, algo digno de destacar. ¿Y por qué comentar esto? Porque pudimos ver a Tilo realmente emocionado durante la perfomance, agradeciendo por todo el apoyo durante su carrera. Además, de contarnos un poco de cómo los álbumes estaban conectados entre sí contándonos una historia, lo que nos llevó al final del concierto, para terminar con un clásico como lo es Copycat. El tema más esperado y el broche de oro para cerrar la oscura velada.
Así fue como una vez más Lacrimosa nos deleitó con sus líricas poéticas en una reunión íntima y perfecta.
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